Como en los ríos, mientras las emociones mantengan su cauce nos permiten transitar por lugares maravillosos y nutrir a su paso. Cuando el río se desborda, puede causar estragos, a veces irreparables.
Cuando las emociones están en calma puedo encontrar la paz para ver la realidad con objetividad.
Muy cierto el valor de educarnos en el manejo de las emociones, sí lo aprendiéramos a edad temprana muchas situaciones incomodas o incluso dolorosas pudieran ser evitadas. Es todo un proceso abstraer la emoción de nuestra porción de cerebro reptil, respirar y ceder paso a la razón con muchas gotas de calma, pero como cualquier proceso de aprendizaje.
Primero se desea el cambio y se hace una actividad de autoconocimiento *self-awareness, luego se des aprende y luego vuelve a aprender.
Gracias por hacernos pensar en estos temas. Equipo de Parentalidad y Liderazgo GFememino.
Me gustó y me sirve mucho este post, al respecto quiereo comentar que a mi me sirve para calmarme en medio de la tormenta, mi polo a tierra que es mi esposo, aprendo mucho de su inactividad momentánea para tomarse su tiempo y obrar.